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¿no? Ayúdame. Usted es la razón por la que todos están muertos. Ayúdame. Fue todo por su culpa. ¡No! Sigues tú. ¡No! ¡Muere! ¡Muere! Tenía razón. Nací para ser médica. y me contéis la verdad. Vivíamos en Dalton’s Ferry. En el río Allegheny. Mi padre estaba fuera, cazando, cuando empezó todo. Él pasaba mucho tiempo fuera. Supongo que mi madre se cansó de esperar que regresara a casa. Así que se fue con Will Smythe y Leah. y me llevó a mí con ellos. Todo el mundo en el pueblo sabía que Will Smythe vivía en aquella cabaña con más de una mujer. Los problemas comenzaron tan pronto como llegamos allí. Ahí vienen, Te digo que ahí vienen. ¿De verdad? ¿Quiénes vienen, Calvin? Andrew, Rachel y toda esa maldita gente. ¿Qué hemos hecho? No hemos hecho nada. Lo sé, Eloíse, ¡pero ya vienen! ¡Se podían meter en sus malditos asuntos! Fanny, levántate. Estoy levantanda. No pasa nada, Leah, vístete, vístete Leah. No, no. ahora Leah. ¡Ayúdame a cogerla, Calvin! Calvin, ¡Cogela! Madre, ¿qué nos van a hacer? Por favor, déjala en paz. ¿Dejarla en paz? No sé lo que le van a hacer, Will. Ni yo. Leah. ¡Mama! Viste a esa mujer. Vístala usted. Dame esa cuerda. Sabía que sucedería. Mamá y el nuevo predicador lanzándose miradas furtivas. y reuniéndose en lugares oscuros. Era un pecado por el que todos pagaríamos pronto y con creces. Si mi padre hubiese estado allí hubiese detenido toda aquella locura. Nosotros te trajimos Will, como predicador. Como predicador y maestro, no como un adúltero pecador. Cerrad la casa y quemadla. ¡Jewell! ¡Jewell! ¡Jewell! ¡Jewell! ¡Jewell! Jewell, tienen un juicio. Han quemado la casa de Will. Jewell. Van a colgarle. Déjalos. Maggie, no lo entiendes. Quédate al margen, es un error. No te metas en esto. Jewell, ¿qué me dices de los otros? Tenemos que vivir aquí. ¿Y Marion? ¡Jewell! ¡Jewell! Papá y mamá. siempre discutían por el Sr. Will. A mí me preocupaba mucho. Entrad, moveos. Por favor. ¿Para qué nos traéis aquí? No hemos hecho nada. No me digas eso a mí, Eloise. Ya sabes lo que habéis hecho. Y tú, Will Smythe, eres culpable de poligamia y adulterio. ¡No es cierto! ¡Él no está casado!
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