La Campera 92.9 FM Ciudad Jimenez Escucha en vivo

En direct La Campera 92.9 FM Ciudad Jimenez écouter, Alternativas de transmisión en vivo Corriente 1 y Corriente 2 prueba nuestras opciones ..
La Campera 92.9 FM Ciudad Jimenez
1 Star2 Stars3 Stars4 Stars5 Stars (1 votes, average: 4.00 out of 5)
Cargando…
Radios populares

La Campera 92.9 FM Ciudad Jimenez escuchar

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

La Campera 92.9 FM Ciudad Jimenez, Online La Campera 92.9 FM Ciudad Jimenez Radio en vivo internet

¿A quién llamamos primero? no terminará nunca. Primero a Nueva York. Hora de hablar con el Sr. Schenk. Porque la suya es una historia contada con luz eterna. Dicen que allí hace más calor en verano y frío en invierno. ¿Y qué va a hacer con la ropa? Ya la comprará, mamá. No querrá gastarse el dinero en ropa. No tendrá otra elección. Estará allí durante Radio Estás preciosa, Nancy. Gracias. Estás muy guapa. Este lugar me desespera. ¿Por qué? Porque eres la chica más guapa del condado de Wexford. Deberías poder elegir a cualquier hombre, y aspiras a que George Sheridan, del equipo de rugby, se fije en ti. ¿Crees que lo hará? Claro que sí. Sé que te gusta, Nancy. Pero tampoco es Gary Cooper. Esos chicos con aceite en el pelo y chaqueta Radio Tiene unos ojos preciosos. Y heredará una tienda preciosa en la plaza del mercado. ¿Por qué no te pusiste el vestido azul? ¿Quieres decir que por qué no me he arreglado? Supongo que porque me voy. Cuidado. Vamos. Ha mirado hacia aquí dos veces. ¡Qué va! Viene hacia aquí. ¡No es cierto! ¿Por qué iba a mentirte sobre qué hace George Sheridan? ¿Quieres bailar? ¿Eso es todo lo que tienes? Ay, Eilis, debería haberte cuidado mejor. Tú me has comprado casi toda la ropa. Por eso me voy, porque no puedo comprármela yo. Si es solo por eso, me gastaría todo mi dinero en ti. Encantada. Pero no puedo comprarte un futuro. No puedo comprarte la vida que necesitas. Lo sé. ¿Vendrás a verme alguna vez? Sí. ¿Y te cuidarás mucho? Tú no te preocupes por mí. Y yo también vendré, ¿verdad? Porque no podría soportar si Radio Aún no has metido los zapatos. Ocuparán bastante. Ya está. Perdón. Fuera. La uno, la litera de abajo, es la mía. Tú estás arriba. Esto es un horror. Nunca más. ¿Nunca más irías a América? El error fue volver de América a casa. Me muero por salir de este camarote. Vamos a fumar. No fumo. Tú misma. Te veo luego. A no ser que conozca a algún hombre en primera. Me alegra ver que no todos han dejado la cena, por el pronóstico del tiempo. Esta noche va a ser movida, y ningún pasajero quiere comer. Quizá un poco de sopa, pero nada del guiso de cordero. Por favor, abrid. ¡Vete! Perdona por el olor. Y por el cubo. No importa. Todo el barco apesta. Hasta en primera clase. Por cierto, me han echado de allí. El baño estuvo cerrado toda la noche. Qué zorras. No será lujoso, pero es solo para nosotras. – Abre la puerta. Que te den. – Abre la puerta ya. ¿Me has oído? ¡Que os den! Si os hubierais portado bien, nosotras también. – Ahora no tenéis baño. ¡Fuera del baño! Zorras. Ya puedes usarlo. Voy a por agua. No puedes tomar nada más. ¿Vas a vivir en América? Sí. ¿Tienes papeles y todo? Sí. Y trabajo. ¿Y cómo lo has conseguido? Yo no. Alguien lo hizo por mí. Un cura que conoce mi hermana. ¿Y cómo lo ves? ¿Cuánto tardan las cartas desde Irlanda? Mi hermana dijo que escribiría enseguida. Al principio tardan mucho. Y después nada. ¿Tienes familia en América? ¿Amigos? No. Enseguida conocerás a gente. ¿Dónde vivirás? ¿En Brooklyn? ¿Cómo lo sabes? Casualidad. A veces, da gusto hablar con gente que no conoce a tu tía. ¿Es así como es? Así es. Llevo horas sin vomitar. Qué alivio, ¿no? Tengo mucha hambre. Por eso llevas horas sin vomitar. Ya comeremos mañana. O al día siguiente. Ay, Dios. Vamos a tener que hacer algo contigo. Te pondrán en cuarentena si entras con esa pinta en el país. Nada llamativo. Que no parezcas una fulana. Lo de parecer una fulana, no será problema. Esto no está mal. Me lo dio mi hermana. Póntelo con esto y Radio esto. Preparen sus bolsas para la inspección. No parezcas demasiado inocente. Te pondré carmín y máscara de pestañas. Quizá, la raya de los ojos. Salga de la fila. Gracias. Siguiente. Gracias. Por aquí, por favor. Salga de la fila. Pasaporte, por favor. Ponte recta. Sácale brillo a los zapatos. Y sobre todo, no tosas. Por aquí. No seas grosera o arrogante. Pero no te pongas nerviosa. Acérquese. Piensa como una americana. Muéstrate segura de ti misma. Bienvenida a los Estados Unidos. Por la puerta azul, por favor. Siguiente, por favor. Bendice, Señor, estos dones que recibimos de tu generosidad, por Cristo, nuestro Señor. Amén. Vi que tenías una carta, Diana. ¿Alguna novedad? El Sr. Valera ha tenido otra operación de ojos. Ha estado en Holanda. No quiero noticias que pueda leer en el periódico. El Sr. Valera saldría en la sección de “política”, ¿no, señora Kehoe? Y no se habla de política en la mesa. Cierto. Una operación de ojos no es política. Lo es, si los ojos son de un político. Tampoco me gusta hablar de hospitales. Patty, ¿encontraste esa crema? No. Pregunté a la Sra. Tyler, de Cosméticos. Y le enseñé el anuncio. No quiero tener que ir hasta Manhattan para un tarro de crema. Podrías preguntar en Bartocci’s, Eilis. Sí, señora Kehoe. Ahí seguro que la tienen. Eso no lo sabe seguro. Solo dice que Bartocci’s es mejor que Webster’s, para meterse con Patty. Ambas son muy buenas, y tenéis mucha suerte de trabajar allí. Eilis, por lo que veo, tienes la piel grasa. ¿Cierto? ¿Cómo sueles cuidarla? Pues, la lavo con jabón, señora Kehoe. No hay nada de malo en usar jabón. Lo usaba nuestro Señor. ¿Y qué marca usaba, señorita McAdam? ¿Lo pone en la Biblia? El Señor, era un hombre. No le preocupaba la piel grasa. Señoritas, basta de hablar de la piel del Señor en la mesa, por favor. Las chicas te ayudarán a buscar algo para tu piel, Eilis. ¿Eh, chicas? Hola. Buenos días. ¿Saliste anoche? Salir, lo contrario de entrar. No. Yo fui al cine con mi novio. “¿Y qué fuiste a ver, Dorothy?” Vi “El hombre tranquilo”, Eilis. Está filmado en Irlanda. “Anda, yo soy irlandesa”. Lo sé. Y por eso pensé que te interesaría. Gracias. Solo será un momento. ¿Aún hace calor en la calle? No he salido desde la mañana, pero tiene pinta de hacer mucho calor. Al menos, lo parece. Hace calor, sí. Muchas gracias. Si la gente queda contenta, volverá. Debes tratar al cliente como a un nuevo amigo. Lo intentaré. No se trata de intentarlo. Hay que hacerlo. ¿Intentas ponerte braguitas cada día? No. Quiero decir, no lo intento. Me las pongo. ¿Entiendes lo que te digo? Sí. Bien. ¿Nos trae otra tostada, por favor? Párteme esos perritos.
Radio Online
Bienvenido a nuestro sitio web.